Sobre la Energía Undimotriz

La radiación solar que incide sobre la Tierra, provoca un calentamiento desigual de la misma, generándose en la atmósfera zonas de altas y bajas presiones, lo que se traduce en el desplazamiento de masas de aire (viento) de mayor o menor intensidad.

Esa masa de aire que se mueve (como todo cuerpo en movimiento) es portadora de energía cinética y potencial, y cuando el viento sopla sobre la superficie del mar, el rozamiento entre ambas masas produce el oleaje, que absorbe parte de esa energía solar y la transporta de un lugar a otro. Ese tipo de energía contenida en el movimiento de las olas del mar se conoce con el nombre de ENERGÍA UNDIMOTRIZ, energía que se concentra en la superficie marina y disminuye a medida que se profundiza en la columna de agua, llegando a anularse.

La energía transportada por una ola permanece constante, mientras dicha ola no encuentre un objeto que le impida su progreso, y su valor es la suma de la energía cinética y potencial de las partículas que la componen.

El aprovechamiento de esa Energía undimotriz, como la de cualquier otro tipo de energía, presenta ventajas e inconvenientes.

Entre las ventajas que presenta caben destacar las siguientes: 

  • Es un tipo de energía renovable, inacabable, limpia (que no genera emisiones de gases contaminantes) y que está disponible en cualquier clima y época el año, las 24 horas del día y los 365 días del año.
  • Es un recurso predecible, mucho más que la energía eólica, si se conocen, entre otros factores, el viento en alta mar, las corrientes atmosféricas, las borrascas y tormentas y otros fenómenos meteorológicos.
  • Los elementos captores pueden amortiguar el oleaje en zonas portuarias o erosionables.
  • Los impactos medioambientales generados son muy inferiores, prácticamente nulos, si se comparan con otras energías marinas renovables, como la eólica off-shore.
  • Es un recurso autóctono, para los países que lo poseen, cuya utilización favorecería su independencia energética del exterior, con lo que generaría ventajas desde un punto de vista económico y político.
  • El potencial existente en el mundo de esta energía renovable limpia es muy elevado y se encuentra prácticamente sin explotar, lo que significa un mercado futuro enorme para aquellos artefactos que logren demostrar su viabilidad, tanto técnica como económicamente, suponiendo grandes beneficios para aquellas empresas que estén dispuestas a introducirse en este negocio.
  • Buena correlación entre recurso y demanda (el 37% de la población mundial vive a 90 km de la costa).
  • Energía en fase de desarrollo a nivel mundial.

Sin embargo, y a pesar de sus enormes ventajas, su utilización, como fuente energética, presenta también grandes inconvenientes, que han motivado que, hasta el día de hoy, no se haya encontrado un procedimiento que pueda considerarse técnica y comercialmente viable.

Las causas de que esto todavía no se haya conseguido son, entre otras, las siguientes:

  • La práctica totalidad de las tecnologías que actualmente se están ensayando, disponen sus elementos transformadores, compactos y monoblocks, en la superficie marina (donde se concentra esta energía undimotriz), anclados al fondo marino, lo que supone una permanente exposición a los esfuerzos extremos que el mar puede ejercer (y termina ejerciendo), lo que supone que,  en caso de “CICLOGÉNESIS EXPLOSIVAS”, sea MUY ALTA la posibilidad de que la Boya, o el artilugio flotante, termine rompiendo sus amarras y acabando en la playa (ya ocurrió en el pasado en una playa de las Islas Canarias), suceso que fue recogido en la prensa local.
  • Corrosividad del ambiente salino.
  • El mantenimiento de la estanqueidad es difícil de conseguir (siempre hay, como mínimo, un elemento, en contacto con el agua, que penetra en la parte sensible del generador que se encuentra sumergida) y que termina provocando el colapso del equipo, produciendo elevados costos de mantenimiento y de lucro cesante, por parada del equipo.
  • El diseño suele ser complejo, ya que la irregularidad en la amplitud de fase y la dirección de las olas motiva que la potencia entrante sea aleatoria lo que hace difícil obtener el máximo rendimiento de cualquier dispositivo en todo el intervalo de frecuencias de excitación.
  • Cuando se utilizan generadores rotativos (lo que sucede en la práctica totalidad de los dispositivos captores ya ensayados o por ensayar) es complicado acoplar el movimiento lento e irregular de la ola al generador.

  • La eficiencia de la conversión suele ser baja.

  • Los costes de mantenimiento de las diferentes tecnologías son muy elevados, ya que exige la extracción del mar y el traslado de los equipos, que no olvidemos son de gran volumen y considerable peso, a talleres situados en los puertos de avituallamiento, con la repercusión en los gastos de buques que ello representa, amén del lucro cesante que ello conlleva.